EL LIDER Y EL SENTIDO DE URGENCIA. DIA 7 y último. El desafío de mantener la urgencia

El sentido de Urgencia. Mantener la Urgencia.-

Una organización que pueda mantener el sentido de urgencia a lo largo del tiempo tiene el potencial de convertirse en una máquina de alto rendimiento. Sin embargo, para sostener la urgencia es necesario no solo crearla, y crearla bien, sino volverla a crear una y otra vez.

La fuerza natural del tiempo tiende a llevar a la estabilidad y la satisfacción, la urgencia lleva al éxito, y el éxito a la autocomplacencia.

Si la urgencia sube, se tiene éxito; si la urgencia baja, viene el desastre. 

Una historia, para muchos familiar.

Situación de crisis, resultados negativos, así durante tres años, si bien los últimos 12 meses los resultado son tan devastadores que comprometen el negocio y su supervivencia.

Se trabaja duro, se extiende el sentido de urgencia, se toman decisiones e implementan acciones en todas las áreas de la Empresa, decisiones difíciles y trabajo duro. Las pérdidas se convirtieron en ganancias. Durante mas de año y medio, los resultados económicos mejoraron de manera importante.

Se cantó victoria y muchos se sentían aliviados de que su empresa, planta o división, ya no estuviera en peligro. El comportamiento de todos daba a entender que la guerra había terminado. El sentido de urgencia cayó en picado.

No obstante, había que aprovechar la situación y seguir hacia adelante mejorando, había otro paso mas que dar, había que comenzar la fase dos, pero ¿si todo estaba bien, para qué había que hacer más?, ¿Acaso no se habían hecho ya sacrificios suficientes para eliminar los riesgos?, ¿Pero hasta cuando estos jefes o cuarteles centrales iban a seguir exigiendo?, ¿Pero no se dan cuenta de lo que hemos logrado?

La satisfacción con el status quo, y la aireada resistencia a las nuevas ideas se convirtieron en anclajes que dilataron y detuvieron las iniciativas que se necesitaban.

El problema de los éxitos a corto plazo.

Los éxitos que llegan rápido, mientras sean inequívocos y visibles, demuestran que la visión de futuro es creíble, produciendo el efecto de que los escépticos se conviertan en seguidores a la vez que reduciendo el poder de cínicos y NoNos.

Celebrar los éxitos también es conveniente para que la gente que ha trabajado duro se sienta reivindicada y apreciada. El no ver éxitos en un periodo razonable suele producir descorazonamiento entre los que trabajan duro, a la vez que da alas a los escépticos y poder a los NoNos.

Pero el éxito trae consigo un problema capital: tener que mantener el sentido de urgencia que se necesita para lograr una meta mas ambiciosa o sostener un alto nivel de desempeño a lo largo del tiempo.

Tras un éxito hay quien sigue dándose cuenta de lo que falta para llegar a la visión, o incluso quien capta oportunidades nuevas, sin embargo la mayoría se vuelve autocomplaciente, e incluso inconscientemente, sin darse cuenta de ello. Por lo general ésta gente ven los éxitos como una razón, aparentemente racional, para disminuir la tensión.

Cuando la urgencia decae demasiado y el impulso se pierde, alejar la autocomplacencia de nuevo puede ser mucho mas difícil que la primera vez.

Prever los problemas, usar las estrategias y escoger las tácticas correctas, son las soluciones para cuando decaiga el sentido de urgencia.

Tres pasos, primero ser consciente del problema de decaimiento del sentido de urgencia, segundo, conocerlas herramientas para ponerle fin, tercero, usar las herramientas correctas. Todo lo anterior lo hemos tratado en los siete días que ha durado el viaje a lo largo del sentido de urgencia.

Sobre todo, y recordando los intangibles del liderazgo, como líder utilice la modulación emocional y el auto-conocimiento para que su propia frustración no se convierta en rabia y en un comportamiento que cree conmoción, descontento, ansiedad y frenesí en la actividad que se asocia con la falsa urgencia.

Trabaje para arraigar el sentido de urgencia en la cultura de su organización organización Cuando se tiene cultura de urgencia, la gante valora la capacidad de aprovechar nuevas oportunidades, evitar nuevos peligros y buscar maneras de ganar. 


Entre los comportamientos usuales en esta cultura, se incluyen: estar constantemente en alerta, enfocarse hacia el exterior, actuar con rapidez, eliminar las actividades de poco valor, tensionar incesantemente para el cambio, cuando este es necesario, y asumir el liderazgo para el cambio inteligente, sin importar a que nivel se encuentre la persona, cada uno se sabe líder del sentido de urgencia.

El mundo no solo nos está sometiendo a nuevas oportunidades y peligros, sino que lo está haciendo cada vez a una velocidad mayor.

Aquellos que se sientan cómodos con el status quo se ponen cada vez mas en una situación peligrosa. Aquellos que sienten un interés convulsivo por actuar y ganar, ahora, se ponen en una situación de lograr mas de lo que parece lógico o razonable ara ellos, sus empleados y el mundo en el que todos vivimos.

Enfoquemonos en lo fácil y rápido y comencemos ¡¡¡AHORA!!!

Creo que este viaje por el sentido de urgencia ha sido una experiencia necesaria e ilustrativa de uno de los varios atributos que un Líder extraordinario debe poseer en este siglo XXI. Gracias a todos.


A partir del próximo día el viaje lo haremos a través del libro de Daniel Goleman, Richard Boyatzis y Annie MCkee "El líder resonante crea más".


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